Saturday, March 31, 2007

Life is the bubbles!


Saber correr,
Saber saltar,
Saber que el sol me va a acariciar...
... sueño sin fin, quiero subir,
más mucho más.


- ...jos muy lejos, más alla del mar de sargazos, cruzando los acantilados de la muerte y el laberinto de coral, en las profundidades del oceano, vive el Rey del Mar con sus hijas las sirenas.
Todas son hermosas, pero la más bella es tambien la más impaciente, espera pronto el dia en que pueda subir a la superficie y ver el mundo de los humanos que le fascina tanto.
Aburrida de los mismos amigos de siempre, de las mismas pedas caseras en casa de la abuela, de sus hermanas sin futuro, de su abuela enferma, de los pretendientes pendejos, de su padre sobreprotector, del sexo mediocre, de la escuela aburrida, de los compañeritos de clase chismosos, de los maestros castrantes, y de peces feos, la sirena espera su turno con impaciencia.

Hasta que el dia tan deseado llega.
La sirenita saca la cabeza del agua y ve un joven principe catalán sobre un barco enorme rumbo a Ibiza. Sus miradas se cruzan en el horizonte, el principe le sonrie y la saluda a lo lejos con un gesto, la sirenita se turba todita, pone cara de pendeja y de sus labios escapa un "De aquí soy" que se pierde entre las olas.
Finalmente con profundo pesar, regresa a las profundidades del mar.
La sirena decide entonces volverse residente española y viajar a Barcelona para ver a su principe que tanto ama, asi que acude con el Rey del mar y le dice asi como que no quiere la cosa, que a pesar de haber nacido en el lecho marino, prefiere la butifarra española y el chorizo de Cantimpalo sobre las algas, las conchas y el caldazo de camarón, y que si no podria prestarle 2,500 euros para ir de vacaciones a Europa... (y comprar regalitos)
Cuando la sirenita salió del coma tres meses después (provocado por la madriza que le propino su señor padre) y con animos reforzados de darle a su cuerpo alegria Macarena, vendio su alma
a una empresa de diseño y publicidad marina, donde por un año sufrió las jaladas de su jefe, la perreria de la contadora, las nacadas de sus clientes y la envidia de los otros diseñador...digo... las otras sirenas.
Dejando atras su mundo submarino cruzo el ancho mar hasta llegar a la Generalitat de Catalunya.
Por dias vago por las calles, buscando entre la multitud la figura de su principe, bajo el intenso sol, bajo la fria lluvia, soportando hambre, frio, fatiga, sueño y tipos de cambio monstruosos.
Y el principe, ni sus luces.
Cuando estaba resignada a convertise en una solterona amargad.... digo... en espuma de mar, un gentil pajarillo le dio el pitazo de que el principe estaba bailando en el bar de más moda de la Rambla del Raval. La sirena salió como chiflido cargando un paquete grande de condones y un ramo de novia para lo que pudiera ofrecerse.
Al fin se vieron!!!
El principe estaba hasta las manitas de borracho en pleno menage a trois con 2 negrotes de Amsterdan, y hasta la fecha no sabe muy bien quien era la loca que salio corriendo y llorando del antro con un ramo de flores.
Con el corazon destrozado, la sirenita se sento en una banca de Plaza Catalunya a esperar que el primer rayo del sol la convirtiera en sal de mesa yodatada.
Pero en el ultimo segundo, sintió que se la llevaba la verg... digo... unas hadas mágicas, que conmovidas por la tristeza de la sirenita, la llevaron al mundo de la ilusión donde la convirtieron en legalmente rubia.
Asi que; niños, ya saben... cuando sientan que han encontrado a su principe azul y que darian hasta las nachas por el, amarrense una pesa de 40 kilos a los pies y vivan una nueva vida bajo del mar!
- ... Asi no es la historia! Esa no es la sirenita... eres tu!!! Tonto! Le voy a decir a mi mama!!! ... Buuu juuu juuu!!!
- Maldita sea! Y yo que pensé que si cuidaba a los hijos de mis amigos iba a causar buena super imagen. Niños! ya no lloren y les doy Red Bull!!!



Post Scriptum: Mientras escribía esto fui testigo de una llamada telefónica que provocó la muerte de mis pececillos!

Friday, March 23, 2007

Fucking Spring time!



Que importa si...
Para dartelas
me bastan dos chelas.
Nachas ligeras!
Como burro en primavera.
Nachas ligeras!

Me haces daño solo a mí.